Uno de los retos más grandes a superar al momento de realizar una restauración directa clase II, es el de precisamente restaurar adecuadamente el punto de contacto. Si bien recuperar la anatomía oclusal es importante, no debemos perder de vista que recrear puntos de contacto proximales, con una correcta anatomía y funcionalidad, será en mayor medida parte del éxito de este tipo de restauraciones.
No obstante, las matrices metálicas convencionales son poco efectivas para lograr este fin, puesto que, con la intención de ajustarlas lo mejor posible al diente, debemos tensarla y adaptarla para que al momento de empacar el material no haya excedentes en zonas indeseables, además de que al ser recta la matriz produce una cara proximal igualmente recta, lo que deja un punto de contacto abierto y sin la anatomía adecuada.
Por ello, la falta de un correcto punto de contacto con el tiempo se traducirá en impactación de alimento, caries recurrente, movilidad dental y complicaciones periodontales, sin dejar de lado la incomodidad provocada al paciente por la percepción de un trabajo deficiente que podría llevar incluso a perderlo.¹
En estudios in vitro y en vivo realizados con matrices seccionales y anillos, se demostró un incremento relativo de la separación de los contactos proximales existentes.² Estos mismos estudios mostraron que los contactos proximales fueron menos ajustados que los que ya existían antes, en donde fue utilizada una banda matriz convencional.³
Estos sistemas de matrices seccionales nos ofrecen ventajas importantes con respecto a la clásica banda matriz. Tal es el caso de Unimatrix R, de la compañía TDV, este sistema consta de un anillo duro y uno suave entre los que podemos elegir de acuerdo a la presión y separación dental que necesitemos ejercer en la zona a tratar.
Asimismo, cuenta con matrices preformadas anatómicamente que son convexas; esto nos permitirá restaurar la cara proximal del diente, al igual que recuperar la curva tanto buco-lingual como cérvico-oclusal. Cabe señalar que están disponibles en tres tamaños diferentes: pequeña, mediana y grande, esta última con una lengüeta subgingival dirigida hacia cervical para los casos en los que el piso de la cavidad es más profundo.
Unimatrix R también cuenta con protectores de silicón triangulares que se colocan en las puntas de los anillos y por su forma ejercen presión en la zona interproximal, sujetando los extremos de la matriz para evitar el derrame del excedente de material, mantenerla en el lugar deseado y separar el punto de contacto para que de esta manera al terminar la restauración y retirar el anillo, podamos conseguir puntos de contacto óptimos. Igualmente cuenta con una pinza para colocar de manera fácil y segura el anillo de Unimatrix R.
Ya hemos descrito ventajas importantes de Unimatrix R sobre las matrices convencionales, pero también tenemos que mencionar que es un sistema mucho más cómodo para el paciente y fácil de utilizar para el odontólogo, lo que permite un ahorro sustancial de tiempo en la consulta y da más seguridad en la reconstrucción de los puntos de contacto.⁴
Por lo anteriormente mencionado, podemos concluir que Unimatrix R es un sistema vanguardista para restauraciones de clase II imprescindible en los consultorios dentales.
Referencias bibliográficas:
¹. Hancock, E. B.; Mayo, C. V.; Schwab, R. R. & Wirthlin, M. R. (1980). Influence of interdental contacts on periodontal status. Journal of Periodontology. 51(8): 445-449.
². Loomans, B. A.; Opdam, N. J.; Roeters, F. J.; Bronkhorst, E. M. & Burgersdijk, R. C. W. (2006). Comparison of proximal contacts of Class II resin composite restorations in vitro. J Operative Dentistry. 31(6): 688-693.
³. Loomans, B. A.; Opdam, N. J.; Roeters, J. F.; Bronkhorst, E. M.; Burgersdijk, R. C. W. & Dörfer, C. (2006). A randomized clinical trial on proximal contacts of posterior composites. American Journal of Dentistry. 34(4): 292-297.
⁴. https://tdv.com.br/produtos/matrices-1/unimatrix-r/?lang=es
Escrito por:
Dr. Efraín Guevara