La anestesia local en odontología produce un bloqueo reversible de la conducción del impulso nervioso, inhibe la función sensitiva y motora de las fibras nerviosas y suprimen la sensibilidad dolorosa transmitida por fibras aferentes vegetativas.
La anestesia va de la mano con la anatomía del cráneo y para poder realizar una correcta técnica de bloqueo debe aplicarse en los puntos adecuados según las referencias anatómicas .
Existen varias técnicas de anestesia para las diferentes zonas a trabajar:
Contamos con las opciones: alveolar superior posterior, alveolar superior medio, alveolar superior anterior, palatina, mandibular, mentoniana, etc. Cada una con sus referencias anatómicas precisas, bloquean ciertos órganos dentarios, hueso y mucosa.
Después de haber recibido toda la teoría adecuada como alumno de odontología, comienzas con las prácticas de anestesia con tus compañeros y posteriormente entras a clínica donde empiezas a trabajar directamente con los pacientes, siendo esto uno de los mayores retos a superar como alumno de la carrera de odontología , ya que el éxito de la mayo- ría de nuestros tratamientos y la calidad de atención depende de la aplicación correcta de la técnica de anestesia para el bloqueo adecuado de la zona a trabajar.
Platicando con algunos colegas sobre su experiencia al anestesiar por primera vez en paciente, la mayoría concuerda que es una de las actividades que más estrés les ha generado antes de realizarla, sin embargo, después de terminar la técnica necesaria y tener éxito, el nivel de estrés y nerviosismo bajó, sintiéndose más confiados al realizar el tratamiento indicado.
Algunas recomendaciones que puedo sugerir para todos aquellos que comenzarán a anestesiar tanto a sus compañeros como a sus primeros pacientes son:
PREPÁRATE:
Es importante que conozcas la anatomía y fisiología del cuerpo humano, cuando la domines, te sentirás más confiado y será mucho más fácil identificar las zonas anatómicas a tomar en cuenta como referencia para cada una de las técnicas anestésicas.
Infórmate e investiga los tipos de anestésicos, sus componentes, indicaciones y contraindicaciones. Cada anestésico está diseñado para ciertos tratamientos y tipo de pacientes.
Ten presente el mecanismo de acción, la farmacocinética (liberación, absorción, distribución, metabolismo, excreción y toxicidad), efectos adversos y dosis máximas
recomendadas, de esta forma elegirás el anestésico más adecuado para cada paciente y tratamiento. Recuerda que cada organismo es diferente y debes estar preparado para cualquier situación.
OBSERVA:
Una vez conociendo la teoría, observa a otros compañeros, auxíliate de videos, pregunta a tus maestros, si aún piensas que no estás listo porque te falta acumular más conocimiento o te gana el nerviosismo, sigue observando, recuerda que trabajamos con seres humanos y una falla puede ser grave, perjudicar al paciente e incluso meternos en problemas legales.
CONFÍA:
Confía en tus conocimientos y en ti mismo, recuerda que nuestra profesión suele ser muy empática, si el paciente nota tu nerviosismo se lo transmitirás y te será muy complicado atenderlo de manera adecuada. Mantén tu cabeza fría, tranquila y confía en tus habilidades.
AYUDA:
Pide ayuda si no te sientes con la capacidad de realizarlo solo, si necesitas asesoramiento, tus maestros están para apoyarte y superar estos obstáculos, también a tus compañeros de grados avanzados puedes pedirles ayuda o simplemente solicítales que vean como aplicas la técnica, si tienen alguna sugerencia que te la hagan saber. Aprenderás de mu- chas formas y estilos de trabajar hasta que encuentres la manera que sea más cómoda para ti. Incluso apoyar a tus mismos compañeros o simplemente acompañarse cuando estén haciendo los procedimientos, les ayudará a sentirse más confiados.






